Aunque no es habitual, a veces en el sistema eléctrico hay situaciones en las que no hay suficiente generación para abastecer toda la demanda. Esto puede deberse a una punta de consumo extraordinaria o a una pérdida súbita de generación renovable. Por ejemplo, un cambio brusco de las condiciones meteorológicas puede afectar a la generación renovable.

Ante este tipo de situaciones se cuenta con medidas preventivas y una de ellas es el servicio de interrumpibilidad: una herramienta que permite flexibilizar la operación del sistema eléctrico desde el lado de la demanda. Los grandes consumidores de energía eléctrica (la gran industria), en respuesta a una orden de reducción de potencia dada por el operador del sistema, reducen su consumo para mantener el equilibrio entre generación y demanda, para que así al resto de los consumidores no les falte electricidad; percibiendo a cambio una retribución económica.

Este servicio es una herramienta de gestión de la demanda para dar una respuesta rápida y eficiente a las necesidades del sistema eléctrico de acuerdo con criterios técnicos, de seguridad del sistema, y económicos, de menor coste para el sistema.

En la sección “Gestión de la demanda” de la web e·sios puedes encontrar la información relativa al recurso interrumpible puesto a disposición de la operación del sistema por los proveedores actuales del servicio de interrumpibilidad de forma agregada, por comunidad autónoma y por sector de actividad.