Para ello, dispone de un sistema de gestión de riesgos que cubre tanto los riesgos de los procesos internos como los del entorno donde se desarrollan las actividades de la compañía. El sistema es conforme al estándar ISO 31000 sobre los principios y directrices en la gestión de riesgos. Adicionalmente, Red Eléctrica dispone de dos sistemas específicos, uno de control interno de reporte financiero (basado en la norma norteamericana Sarbanes-Oxley) y otro de control interno en la operación (basado en la norma SSAE 16). Estos sistemas están sometidos a auditorías periódicas, internas y externas.
Los riesgos más importantes a que está sometido el Grupo Red Eléctrica y que se integran en el sistema de control de riesgos son:
Además de los riesgos específicos anteriores, el Grupo Red Eléctrica se enfrenta a otro tipo de riesgos comunes al desarrollo de actividades económicas y empresariales como son:
El Consejo de Administración tiene la responsabilidad de aprobación de la política de gestión integral de los riesgos, así como el conocimiento y seguimiento periódico de los sistemas de control interno, prevención e información. Dos veces al año, el Consejo procede a la revisión del sistema de control de riesgos y de los riesgos relevantes, sin perjuicio de la información que recibe regularmente de la Comisión de Auditoría en el marco del seguimiento que ésta lleva a cabo de forma permanente.
Los riesgos asociados al cambio climático son especialmente importantes por la función de Red Eléctrica de España como transportista y operador del sistema eléctrico español, ya que los cambios regulatorios y tecnológicos necesarios para la transición energética (requerida para alcanzar los objetivos climáticos) plantean una serie de retos e incertidumbres. Por lo tanto, debido a su impacto potencial en el negocio y a su probabilidad en el largo plazo, se han identificado como unos de los riesgos emergentes más relevantes para la organización y se ha desarrollado una metodología específica para su identificación, priorización y cuantificación.
Entre los riesgos emergentes asociados al cambio climático, se han evaluado los riesgos físicos asociados a la modificación de las variables climáticas que pueden afectar a las instalaciones o a los servicios que presta el Grupo y los riesgos de transición, asociados a los cambios que implica la lucha contra el cambio climático: regulatorios, tecnológicos, de mercado y reputacionales. Además, tal y como se incluye en las recomendaciones de la Task Force on Climate related Financial Disclosures (TCFD), se han considerado distintos escenarios, diferentes para los riesgos físicos y de transición. Los riesgos físicos más importantes son los relacionados con la afección a las instalaciones de intemperie (líneas eléctricas) por eventos extremos (viento) y con los incendios bajo las líneas y en el entorno de las subestaciones eléctricas. Por su parte, los riesgos de transición más relevantes están relacionados con las dificultades para poner en servicio las infraestructuras necesarias para el cumplimiento de los objetivos de la transición energética. La información sobre su impacto potencial en el negocio y las medidas de mitigación implementadas se pueden consultar en detalle en el Informe de Sostenibilidad 2019.